Un terremoto es una sacudida del terreno que se produce debido al choque de las placas tectónicas y a la liberación de energía en el curso de una reorganización brusca de materiales de la corteza terrestre al superar el estado de equilibrio mecánico.
Otras de las causas del terremoto son: desprendimientos de rocas en las laderas de las montañas, hundimiento de cavernas, variaciones bruscas en la presión atmosférica por ciclones, y actividad subterránea originada por un volcán en proceso de erupción.
También puede ser ocasionado por las fuerzas externas provocadas por el hombre, como los experimentos nucleares o el poder que ejercen los millones de toneladas de agua acumuladas en represas y lagos artificiales.
Estos mecanismos generan eventos de baja magnitud que generalmente caen en el rango de microsismos,temblores que sólo pueden ser detectados por sismógrafos.
La corteza de la Tierra está formada por doce placas de aproximadamente 70 kilómetros de grosor (Americana, Sudamericana, Euroasiática, Africana, Antártica, Indo australiana, Filipinas, del Pacífico, Cocos, Caribe, Árabe y Nazca), las cuales se están acomodando constantemente y desde hace millones de años.
Las zonas donde las placas ejercen fuerza entre ellas se denominan fallas, que a su vez son específicamente los puntos donde con más probabilidad se originan los fenómenos sísmicos. Sólo el 10% de los terremotos suceden lejos de los límites de estas placas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario